Pérdida de la residencia o ciudadanía

¿Se puede perder la residencia o ciudadanía? ¿Cómo puede evitarse y qué se puede hacer al respecto?

Emigrar es una de las decisiones más difíciles en la vida de una persona por diferentes razones, ser extranjero es una de ellas. En el caso de Estados Unidos lograr la residencia permanente o ciudadanía es prácticamente un sueño, porque esto permite regularizar la situación migratoria y gozar de beneficios como poder trabajar y vivir de manera permanente en el país. Ahora, ¿sabías que el hecho de tenerla no exime a los extranjeros de la posibilidad de pérdida de residencia o ciudadanía en los EEUU?

Las autoridades migratorias estadounidenses pueden tomar esta decisión en caso de que quienes cuenten con la residencia permanente o ciudadanía lleven a cabo acciones que comprometan su estancia en el país, como por ejemplo haber recurrido al fraude para obtener la residencia o mentir para conseguir la naturalización. Estas acciones han aumentado en los últimos años y tienen como consecuencia la pérdida del estatus. 

Para que comprendas mejor lo que significa ser ciudadano, te explicamos que de acuerdo con el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés) el hecho de ser ciudadano americano implica “lealtad” a la Constitución y el “compromiso” a cabalidad con el país, por lo que las personas reciben derechos y privilegios que garantiza  otro estatus migratorio. Así que se trata de una gran oportunidad que no se debería desaprovechar. 

Pero, ¿qué pasa cuando se pierde el estatus? ¿Cómo quedan los beneficios? ¿Se pierde la oportunidad de permanecer en territorio estadounidense? ¿Y el permiso de trabajo? Efectivamente se pierden ya sea porque la persona haya cometido faltas o porque la persona haya decidido renunciar al estatus. 

Saber qué hacer ante la pérdida de residencia o ciudadanía es fundamental para evitar mayores consecuencias. Contar con un abogado experto en temas de inmigración ayudará a llevar el caso de la mejor manera. 

¿En qué casos se puede perder  la residencia o ciudadanía?

Son varias las causas que pueden llevar a perder la nacionalidad americana. Teniendo en consideración la Ley de Inmigración y Nacionalidad estadounidense compartimos los siguientes: Por haber obtenido la nacionalidad de un país distinto a los Estados Unidos luego de alcanzar la mayoría de edad. 

  • Por haber jurado lealtad a un país distinto a Estados Unidos tras alcanzar los 18 años de edad. 
  • Por prestar servicio en un Ejército en el exterior que sea contrario a los EEUU. 
  • Por ofrecer su fuerza laboral en otro país tras alcanzar la mayoría de edad. En este caso también es necesario que se corrobore que la persona tiene dos nacionalidades y que haya realizado algún juramento para obtener dicho puesto de trabajo. 
  • Por haber sido sentenciado por cargos que estén vinculados con traición a la patria. 
  • Por haber obtenido una condena que demuestre pretensiones de derrocamiento del gobierno estadounidense. 
  • Por haber renunciado de manera voluntaria a la ciudadanía americana. 

¿Qué ocurre después de perder la residencia o ciudadanía? Sin duda, las consecuencias son muy significativas porque esto hará que la persona quede sin los derechos y beneficios que le fueron otorgados gracias a la ciudadanía. De hecho, es importante aclarar que para EEUU quien pierde su nacionalidad es un apátrida, lo que quiere decir que no es reconocido por el Estado y, por lo tanto, carece de su protección. 

Otro aspecto que se debe tomar en cuenta es que renunciar o perder la nacionalidad tampoco es motivo para que un ciudadano extranjero no sea juzgado por delitos en territorio estadounidenses. Esto tampoco lo exime de cumplir con el pago de impuestos y demás obligaciones de carácter financiero. 

¿Cuándo no está en riesgo la nacionalidad? 

Las autoridades estadounidenses reconocen que no existe intención de dejar la nacionalidad cuando: 

 

  • Se ofrece servicio militar en las Fuerzas Armadas de un país que no sea contrario a los EEUU. 
  • Se ofrece la fuerza laboral en un cargo que no pertenece al ámbito político. 
  • Se ofrece alianza a otro país. 

En estos tres casos no se coloca en riesgo la nacionalidad americana, sin embargo, es probable que a la hora de realizar trámites como la renovación del pasaporte o ejercer el derecho al voto en Estados Unidos, la persona sea consultada sobre su deseo de abandonar o no la ciudadanía. 

En caso de que la persona quiera efectuar su renuncia de manera voluntaria y se encuentre en territorio estadounidense, debe dirigirse al Departamento de Seguridad Interna. Si está en otro país, debe dirigirse al consulado o embajada de los EEUU en esa nación para formalizar su declaración. Como parte del proceso para dejar la nacionalidad es necesario demostrar que dicha acción es completamente voluntaria y que el objetivo es perder la  “condición” de ciudadano americano. 

Las autoridades estadounidenses reconocen que en realidad existen razones para perder la nacionalidad cuando la persona presta servicio en las Fuerzas Armadas de un país que es enemigo de los EEUU, cuando se tiene posición política en un gobierno de otro país y cuando la persona es señalada por intento de golpe de Estado. Tras reunir las condiciones en cualquiera de estos tres casos, son las autoridades consulares las encargadas de corroborar que en efecto se cumple con el abandono de la nacionalidad. 

Saber qué hacer ante la pérdida de residencia o ciudadanía es fundamental para evitar mayores consecuencias. Contar con un abogado experto en temas de inmigración ayudará a llevar el caso de la mejor manera.”

Requisitos para ser ciudadano estadounidense 

Conseguir la ciudadanía no es un proceso rápido y los tiempos dependen de la realidad de cada caso. La institución encargada de gestionar este trámite es USCIS. Un dato importante es que la ciudadanía se otorga a quienes nacen en territorio estadounidense, no obstante, igualmente se puede obtener a través de los padres o por vía de naturalización. 

Estos son los requisitos para adquirir la ciudadanía americana: 

  • Ser mayor de edad. 
  • Poseer la residencia permanente. 
  • Cumplir con el formulario N-400 https://www.uscis.gov/es/formularios/n-400
  • La persona debe formalizar su solicitud ante el USCIS, la agencia evaluará dicha solicitud y se le hará llegar una cita para dejar registro de las huellas dactilares. 
  • La persona deberá realizar el examen de naturalización, que es el último paso para lograr la ciudadanía. El mismo es realizado por personal del USCIS. La evaluación consta de dos pruebas, una de carácter cívico y otra de inglés (para evaluar la escritura, lectura y pronunciación). Este examen es obligatorio a menos que se trate de personas con alguna discapacidad o de personas que estén por encima de los 50 años. 
  • Es necesario asistir al acto de juramento, esto si la persona logra tanto la aprobación de la entrevista y como del examen Durante este acto es que se formaliza la ciudadanía americana y se obtiene la naturalización. 

Una vez que ya se es ciudadano de los Estados Unidos, la persona tendrá derecho a ejercer el voto en el país, a ser protegido, a trabajar formalmente y a vivir de manera permanente en territorio estadounidense. También tendrá obligaciones como el pago de impuestos y el cumplimiento de las leyes. 

Otra gran ventaja es que la persona estará en todo el derecho de solicitar el pasaporte americano. 

¿Cómo es la naturalización de cónyuges de ciudadanos? 

Mucho se habla de la posibilidad de convertirse en ciudadano americano a través de la naturalización de cónyuges, que cuenten con este estatus migratorio, y son incontables los casos de personas que lo logran. Según la Ley de Inmigración y Nacionalidad de los Estados Unidos, esto aplica para quienes hayan tenido residencia permanente o green card por 3 años https://www.xavierlawfirm.com/inmigracion/ajustes-de-estatus. Y quien haya permanecido en matrimonio durante 3 años con un cónyuge americano. 

Adicionalmente, existen casos de cónyuges de ciudadanos americanos que trabajan fuera de Estados Unidos que igualmente pueden resultar elegibles aunque no tengan el tiempo de 3 años que se necesita para obtener la residencia permanente. 

Solamente resultan elegibles para la naturalización quienes: 

  • Tengan más de 18 años.
  • Hayan permanecido en el país por mínimo 3 años.
  • Hayan permanecido en matrimonio con un cónyuge de nacionalidad americana durante 3 años. Esto tiene que haber sido antes de la fecha de solicitud de la ciudadanía y hasta que se realice el examen de naturalización. 
  • Haber estado en el mismo lugar donde se encuentra el USCIS por lo menos 3 meses antes de formalizar la solicitud. 
  • Haber vivido en condición de residente permanente 3 años antes de la formalización de la solicitud. 
  • Permanecer de manera continua en territorio estadounidense a partir de la formalización de la solicitud y hasta que se obtenga la naturalización.
  • Tener conocimientos de inglés y conocer la historia de los Estados Unidos. 
  • Haber vivido en territorio estadounidense 18 meses de los 3 años que se necesitan para hacer la solicitud. 
  • Demostrar que ha sido una persona sin antecedentes y respetuosa de la Constitución estadounidense. 

¿Qué ha cambiado? 

Todos hemos sido testigo de la política de endurecimiento hacia los inmigrantes que lleva adelante el gobierno estadounidense y que ha cambiado lo que antes de esta última gestión se mantenía en el país en cuanto a trámites migratorios. 

Y es que las modificaciones no paran, todo con el objetivo de poner freno a la inmigración en el país. En cuanto al trámite para la solicitud de residencia o ciudadanía, en julio pasado el gobierno anunció que haría “revisiones” a la prueba de naturalización. Dichos cambios estarán a cargo del USCIS y básicamente se actualizarán preguntas sobre el examen para evaluar el conocimiento de inglés así como también la parte cívica.

Luego de este anuncio se prevé que el USCIS realice una nueva prueba entre diciembre de 2020 y principios de 2021. 

Al respecto, el director del USCIS, Ken Cuccinelli, dijo en esa oportunidad que el propósito es garantizar que los solicitantes entiendan lo que significa obtener la ciudadanía estadounidense. 

“Actualizar y mantener un examen que esté al día y sea relevante es nuestra responsabilidad como agencia, para que podamos ayudar a nuevos futuros ciudadanos a comprender completamente el significado de la ciudadanía de Estados Unidos y los valores que unen a todos los estadounidenses”, señaló Cuccinelli. 

¿Esto quiere decir que el presidente Trump busca incrementar los niveles de dificultad del examen para evitar que los solicitantes aprueben el examen de naturalización? ¿Representarán estos cambios dificultades a la hora de obtener la ciudadanía? 

Contra la ciudadanía 

Los anuncios relacionados con el tema migratorio no se detienen. Y es que después de anunciar que se harán revisiones al examen de naturalización, en agosto pasado el gobierno de los Estados Unidos dio a conocer que considera la eliminación de la ciudadanía, tanto para quienes llegaron al país de manera irregular como para los hijos nacidos en territorio estadounidense cuyos padres son ciudadanos extranjeros. 

“Estamos considerando eso muy seriamente. La ciudadanía por nacimiento, donde cruzas la frontera, tienes un bebé y felicidades, tu bebé es ahora un ciudadano de Estados Unidos. Es francamente ridículo”, dijo. 

Meses antes, el presidente Trump señaló que a través de una orden ejecutiva es posible eliminar el derecho a la ciudadanía por nacimiento, establecido en la enmienda 14 de la Constitución del país. Sin embargo, académicos han asegurado que no es algo que pueda hacer por cuenta propia. 

Aún cuando es así, la política antiinmigración continúa con más fuerza y el tema de eliminar la ciudadanía por nacimiento es parte de la amplia lista de órdenes ejecutivas emitidas por el gobierno de los Estados Unidos.

En la lista se pueden mencionar las modificaciones del trámite de asilo político, el incremento de las redadas, el aumento de las deportaciones, las constantes restricciones para conseguir permisos de trabajo, las dificultades para obtener la ampliación de visas y las restricciones a los programas de ayuda gubernamental, una de las decisiones que más ha generado polémica. 

La lista parece no tener fin y la comunidad de inmigrantes se mantiene alerta ante nuevas represalias por parte de un gobierno que se ha declarado en contra de la política migratoria y que ha tomado decisiones con el objetivo de evitar la permanencia de ciudadanos extranjeros en el país ¿El gobierno de turno en Estados Unidos ha logrado su cometido? ¿Qué tantos inmigrantes han sido afectados? ¿Cuánta gente falta? ¿Qué viene ahora? 

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